¿CLARA Y QUIÉN?! idealista!

http://es.youtube.com/watch?v=M1EThZlXi0Y

No he podido contenerme. He vuelto a caer como un merluzo en las redes del Seine. Tengo a mi alcance un poder de comunicación tan importante y de tanta repercusión como es Internet que permite a cualquier navegante descargarte un cúmulo de información que desata la tempestad de todos los sentidos.
Es de noche, Antoine ha cumplido recientemente los 33 y se encuentra solo , tremendamente solo en una ciudad tan grande y con tanta gente como Paris. En medio de su soledad , Clara aparece en su vida. Y juntos comparten un momento sensual, bailan hasta la extenuidad en la orilla del Sena, cantan como los ángeles mientras se confiesan amor perpetuo. Se han encontrado en medio de la calle, y ha sido como la mayoría de las cosas de la vida: FASCINANTE. Se abrazan, sonríen, se besan, la noche es menos amarga al lado del amor ideal. Ella está preciosa y se mueve de una forma tan excitante con su pelo corto, elegante, preciosa, enamora con solo escucharla.
¿Y Él? Él se encuentra expectante, ríe con ella, se contagie de su felicidad. Esta noche podría durar para siempre y nos podría situar a la orilla del Spree. Una noche maravillosa de verano (Shakespeare, ohhh! gran maestro!) que tarde o temprano se convertirá en día, agarra sus cabellos, se sumerge en la profundidad de su vestido. ¡ la quiere mucho! Se contagia y es venenoso. Es sin duda el amor que manifiestan el uno por el otro. No me gusta habitualmente redundar sobre el mismo tema, pero es que este se ha transformado en una RENGAINE que no me deja dormir, o si duermo, sueño con ellos. Paseando por el río de la vida, disfrutando de una noche perpetua que se prolongará para siempre en nuestros corazones. Cada uno de nosotros queremos ser partícipes de una historia de amor con en el cuento. Queremos ser parte de la historia. Ser el príncipe azul, la princesa prometida, que nos alaben con rosas y nos despierten con un beso y un “ te quiero”.
Biolay jamás pensó en mi cuando compuso esta melodía, ni yo pienso en él cuando la escucho, pero esa explosión de fuegos de artificio no me dejan conciliar el sueño, mi descansar el alma, esa conversación maravillosa donde ambos se abren el corazón en medio del parque , cerca de la estación Montparnasse. Se estaban conociendo, pero ya sabía todo uno del otro. El “Ars amandis “ no lo cuenta todo, no lo explica todo, una parte importante es la practica y esta pequeña (pero gran) película me llena por completo. Clara y yo. Yo y el amor. Si nos encontrásemos por casualidad en una esquina de la calle, nos diríamos uno al otro :C’est de la change!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

http://www.lequotidienducinema.com/critiques/claraetmoi_critique/critique_clara_et_moi.htm

Nunca más volveré a tocar el tema, lo prometo. Espero ser capaz de cumplir lo prometido.